No "Planeta Axel. Blog de Axel Torres en MARCA.com, Miércoles, 8 de abril de 2009", diz quem sabe:
"Parecía la parte débil del cuadro, la de los super outsiders, en palabras de Arsène Wenger. Se decía que el Manchester United tenía un camino llano hacia Roma con la alfombra roja ya preparada. Pero el primer obstáculo no fue la pequeña piedra que se suponía. El Oporto jugó un encuentro repleto de atrevimiento en su fase inicial y lleno de orden e inteligencia en su cómputo global. Recordó al de 2004, lo que confirma una vez más su capacidad para regenerarse. Se van las estrellas que llegaron siendo futbolistas anónimos y el proceso vuelve a empezar. Y nunca se detiene. Old Trafford coronó a Fernando, hasta ayer un medio centro con buena pinta pero sin experiencia en el primerísimo nivel, desde hoy una realidad que se doctoró en la máxima exigencia en el estadio del campeón de Europa. Su partido fue monumental, descomunal, inmenso. Siempre bien posicionado, extraordinario en la recuperación, poseedor de una determinación asombrosa, ofreciéndose en los apoyos, clarividente en la salida de balón, poderoso en la resistencia física para destacar en el correcalles de ida y vuelta de los minutos finales. Su historia define el funcionamiento de su club para reinventarse continuamente, para competir con recursos limitados con los grandes gigantes del continente.
Si los demás tienen más dinero, tú debes ver más fútbol que ellos. O al menos, ver el fútbol que ellos no ven. La segunda división brasileña, por ejemplo. Allí, en el Vila Nova, detectaron los ojeadores del Oporto a un chico de 19 años llamado Fernando. Lo contrataron por menos de un millón de euros y lo cedieron al Estrela Amadora para que adquiriera experiencia. Una temporada para que conociera la liga portuguesa, y al verano siguiente lo convirtieron en titular. Se había marchado Paulo Assunçao y el puesto de medio centro estaba libre. Su titularidad ya es indiscutible. Y el acierto de la operación, aún más.
Fue el de Old Trafford un partido que obligó a Ferguson a realizar varias modificaciones tácticas. Su 4-3-3 incial, con Paul Scholes de "cinco" y Carrick y Fletcher de interiores, fracasó con estrépito en los minutos iniciales. La presión adelantada del Oporto, repleta de agresividad, ahogaba por completo al campeón de Europa. Sir Alex pasó al 4-4-2, metiendo a Cristiano Ronaldo de segundo delantero.
Mejoró el equipo en cuanto a posesión de balón y a dominio del partido, pero el crack de Madeira se perdió en una zona en la que no había espacio alguno: los dos centrales y el MVP Fernando le comieron el terreno. El United pareció equivocarse en el reparto de papeles de sus dos medios centros. Scholes jugó toda la primera parte más retrasado que Carrick, con lo que nunca apareció cerca del área para buscar el disparo de media distancia. El equipo echaba de menos, además, la clarividencia del ex del Tottenham para mover el equipo. Pudo pesar también la fatiga -el Man U fue el único de los ocho cuartofinalistas que jugó el domingo en su liga... ¡y eso que su partido era el martes!-,al igual que la baja de Ferdinand. Evans se equivocó en el primer gol y hubo un serio error de coberturas en el segundo, impropio de la máquina defensiva que era el United hasta hace un mes. El 2-2 pareció un resultado justo que deja la eliminatoria mucho más abierta de lo que se esperaba."